Un reciente estudio realizado por la certificadora internacional Best Place to Live® mostró que los clientes están valorando cada vez más su inversión inmobiliaria, especialmente cuando se trata de proyectos bien diseñados, con buenas terminaciones y áreas comunes de calidad. En la medición 2024, los aspectos que más subieron en evaluación fueron la calidad del proyecto (22 puntos más) y la calidad de los equipamientos (20 puntos más), además de un fuerte aumento en la intención de recompra.
Estos resultados reflejan un cambio claro en lo que las personas esperan de su hogar: ya no basta con tener un techo propio, sino que se busca vivir en un espacio funcional, moderno, cómodo y con respaldo de una inmobiliaria confiable.
En CFL nos sentimos plenamente identificados con esta tendencia. Desde nuestros inicios, nos hemos enfocado en entregar proyectos que respondan a las necesidades reales de las personas. Esto se refleja en detalles como terminaciones duraderas, espacios pensados para una vida práctica, áreas comunes que funcionan como una extensión del hogar y ubicaciones estratégicas que facilitan el día a día.
Pero más allá del diseño y la construcción, también trabajamos fuertemente en la experiencia del cliente: asesoría clara y honesta desde el primer contacto, acompañamiento en el proceso de compra y una postventa dedicada. Sabemos que la relación con nuestros clientes no termina con la entrega del departamento, y por eso buscamos mejorar constantemente.
Invertir con CFL es más que comprar un bien raíz: es elegir una experiencia pensada en ti, con foco en la calidad, la confianza y el bienestar a largo plazo.